SAN VALENTÍN SAN VALENTÓN

Ya está aquí, en breve, en quince días se celebra el día de amor, puntual como las campanadas de NocheVieja.

¿Tú lo celebras? ¿Plenamente? ¿Con todo el cuore pero no se lo digo a nadie? ¿San Valentín es todos los días… como el día del padre/madre? Jajajaajjajaj… El día de San Valentín lo inventó el Corte Ingles como dicen muchos pero… ¿a quién no le gusta que ese día le den un beso más tierno y cariñoso de lo normal? (ojo, que para mí es normal darme un beso todos los días) y si no tenemos pareja, pasarnos el día imaginando cómo sería nuestra “casita de papel” con éste compañero del curro, con el macizo del gimnasio o aquel amor platónico que desapareció de nuestra vida al darnos las notas de verano del instituto.

¿Y POR QUÉ?

Hay que querer, admirar, amar y vivir, sentir mariposas en el estómago como sea, busquémoslas, con una pareja, con una amig@, con un pariente, con nuestra mascota. No es que este estado de por sí acaramelado te haga ver todo de color de rosa, pero ayuda. Desde luego, mientras estás ideando cuántos hijos tendrás con el amor de tu vida no estás pensando que este año no te suben el sueldo ni el IPC y encima te suben el abono transporte… eso son minucias.

Pasarte por tu pastelería favorita y elegir la palmera de chocolate más grande, con más forma de corazón posible y zampártela en casa compartiéndola con:

- tu amor en el hogar o amores

- tu más mejor amig@ o panda

- tu prim@ del alma o familia

- tu mascota o en la protectora

Regado con un denso y apetecible tazón de cola-cao… y pensáis, qué suerte estar viviendo este momento sobrepasado de calorías contigo (luego llegará el momento de quién friega las tazas)  pero hablar de sueños futuros, sentimientos presentes y el precio que tiene la leche nos saca de la desidia de lo cotidiano, soñemos, dejémonos llevar, que lata el corazón al son de la lista de reproducción de boleros interminables en los que podamos lucirnos con coreografías reguetoneras y elegantes (o lo que cada uno buenamente pueda). 

PLAN DE VIDA

Nos repiten casi continuamente que la vida son dos días y uno lo pasas currando o en el médico así que está claro que por salud tenemos que aprovechar todos estos días “señalados” para que se note más el amor que inevitablemente todos llevamos en las venas. Es mejor que nos salga lo bueno, que sintamos amor y que nos quieran, que nos quieran bien porque desde luego llega el momento de las noticias y después no hay un San Valentín, NocheVieja ni Champions League que lo levante.

Escusados en San Valentín o San Ballentines (como dice una amiga) dejémonos fluir y querer y hagámoslo nosotros para que la energía fluya y notemos que ese día el mundo, va un poquito mejor. Que para algunos será de algodón dulce y unicornios, para otros de rábanos y tofu, para otros de rosas y chuletón. Sea como sea, el día va a pasar y San Valentín dió su vida el pobre por defender los sentimientos y deseos de las personas que se quieren aunque a él le cortaran la cabeza… ya solo por eso… VIVA SAN VALENTIN!!