ARTE MARGINAL O ART BRUT
“La belleza es pura secreción de la cultura como los cálculos lo son del riñón”. Dubuffet
El arte marginal en sí puede ser seguro más antiguo de lo que creemos pero en realidad el concepto surgió gracias a autores como Dubuffet. Este pintor y escultor francés creó el término “Art Brut” para hablar del arte de las personas que realizaban obras pero no habían estudiado ni conocían sobre el arte “… todo el mundo es pintor!!” aseguraba Dubuffet (que de provocaciones y de arte sabía un rato) al reflexionar sobre la actividad artística como algo esencialmente antropológico e inherente a la especie humana.
Sus obras son el reflejo de una creatividad pura, sin contaminar por la imitación de modelos ya establecidos. Dubuffet afirma que todos llevamos un potencial creativo que las normas sociales anulan. Esto se observa en las creaciones de personas que se mantienen al margen de la sociedad tales como internos de hospitales psiquiátricos, presos, inadaptados, autodidactas o ancianos.
Dubuffet defendió sin descanso los diferentes puntos de vista con respecto a la creación de gente de otras regiones, países o continentes, condición o estamentos muy distintos a los de su cultura propia. Buscan lugares como África, Oceanía, países colonizados, los niños, el arte popular, el entorno rural, el mundo obrero… creaciones realizadas por personas “indemnes a la cultura artística” o sin lo que entendemos por maestría o pericia técnica y cuyos trabajos poseían la fuerza, frescura e invención que muchas de las obras que colgaban en los museos.
Desde 1945 recoge estas obras fundando en el 48 “Compagnie d’Art Brut”, junto a Breton, M. Tapié y otros. La colección firmada llega a las 5000 obras que se expone por primera vez en el 67 en el Museé des Arts Decoratives de Paris instalándose definitivamente en el 76 en el Chateau de Beaulieu de Laussane. La colección está formada en su mayoría por obras de enfermos psiquiátricos, especialmente esquizofrénicos; pese a ello Dubuffet rechazó siempre la idea de arte psiquiátrico, afirmando que “no existe un arte de los locos” el art brut constituye un aspecto fundamental del primitivismo asumido a lo largo del siglo XX por cientos de artistas que permanecen al margen de la modernidad.
EL ARTE MARGINAL ESPAÑOL
Dubuffet en su búsqueda de auto didactas ajenos a cánones e influencias culturales, descubre a Miguel Hernández Sánchez (Ávila 1893 – Paris 1967) –nada que ver con el poeta- y Joaquín Vicens Gironella (Agullana 1911 - Toulousse 1997) a quienes protege. Dos vidas truncadas por la guerra civil y el exílio. Miguel se dedica a pintar para matar sus penas; Joaquín trabajaba el corcho, primero para producir tapones de botellas y utensilios y después para transmitir emociones y mensajes con sus figuras. Miguel Hernández luchó en defensa de la República Española y murió en Paris.
Dubuffet escribió mucho sobre él. En la pobreza y exilio Hernández pidió a un amigo que viajaba a España que contactase con su mujer para que los amantes pudieran reunirse en Paris. El amigo, de regreso, no se atrevió a decirle que la esposa en España vivía con otro hombre. La tristeza le invadió, vivía con un subsidio del Comité para Refugiados que gastaba en pinturas pasando hambre y frío en un cuchitril. En su obra recrea mundos o paraísos perdidos. La esposa que no tiene, los hermanos que no ve, fantasías y palomas de la paz que le han hundido.
Joaquín Vicens, conoció a Dubuffet porque este último además de artista y teórico, era productor de vinos. En una visita al catalán para encargarle tapones de corcho para botellas, se percató de sus piezas artísticas y le invitó a exponer sus piezas en corcho. La guerra también le forzó a adentrarse en tierras francesas.
James Brett forofo y director del Museum of Everything de Londres reúne a los grandes protagonistas del Art Brut entre los que están Miguel Hernández y Joaquim Vicens y realiza exposiciones por todo Europa y formando alianzas con instituciones o iniciativas legales.